Los autobuses no casan con el paso del Cercanías del Aljarafe
El horario de las rutas que pasan por las estaciones no se coordina con el tren, que tuvo 900 usuarios desde la comarca hacia Sevilla en su primer día.
29/03/2011. El Correo
El autobús y el tren no terminan de llevarse bien en el Aljarafe. Solo dos días después de su rutilante estreno, el Cercanías del Aljarafe (C-5) se topa con su primer obstáculo: la frecuencia de paso de los autobuses del Consorcio de Transportes no coincide con el horario establecido para la salida de los trenes de las seis estaciones de la comarca. Esto se produce después de que se hiciera un esfuerzo para modificar el recorrido de cinco líneas de autobuses para que, al menos, los vecinos se pudieran desplazar a unos apeaderos que, salvo el de Sanlúcar la Mayor, estén alejados de los cascos urbanos.
La razón empuja a que haya una coordinación y que los autobuses se aproximen a sus paradas en la órbita de los 10 minutos antes de la salida del ferrocarril. Sin embargo, en el caso del Cercanías del Aljarafe y salvo raras excepciones, las líneas del consorcio o arriban tarde –el primer autobús al apeadero de Camas para cuatro minutos después de la llegada de los primeros vagones– o la espera del ferrocarril supera los 20. Esa circunstancia ocurre hasta a primeras horas de la mañana, donde se supone –a la espera de los sondeos de la demanda de viajeros que realizará Renfe en estas semanas– que se concentra el mayor número de usuarios en dirección a Sevilla.
En Benacazón, por ejemplo, el autobús no llega a tiempo al primer tren, que sale a las 6.15 horas. La línea M-168 (Umbrete-Benacazón) llega 15 minutos después, por lo que el tiempo de espera es de casi media hora para el siguiente. Eso se repite toda la jornada, oscilando entre los 20 y los 55 minutos de espera.
Los viajeros de Sanlúcar la Mayor también se deben armar de paciencia si son usuarios del autobús, aunque parten con la ventaja que el tren para en el casco urbano y pueden ir dando un paseo hasta la estación. La línea M-102, que hace parada allí, permite subirse, como pronto, en el cuarto tren de la mañana, con una espera, eso sí, de sólo 14 minutos. El resto de esperas es mayor, salvo los autobuses en torno a las 14.00 horas, que arriban con el tiempo justo: cuatro minutos antes de partir. Ni siquiera coincide con los pasajeros que vienen de regreso de Sevilla. La línea M-102 ajusta algo el reloj en Villanueva del Ariscal: el autobús no llega al primero, pero al menos, en algunos casos la diferencia es sólo de 10 o 15 minutos. Sólo una apreciación: en dos ocasiones, a las 9.45 y 19.45 horas, el autobús llega a la par que el tren, por lo que toca correr.
La misma tendencia se repite en Salteras, donde sólo el 25% de los 41 autobuses de la M-175 que paran llegan entre cinco y 10 minutos antes que la salida del ferrocarril a Sevilla. En Camas, los primeros autobuses de la línea M-170 se comportan con la intermodalidad, ya que las franjas, salvo para el primero, son de entre seis y 14 minutos. Pero parece que es más por la casualidad y la buena frecuencia –el autobús pasa cada 30 minutos– que por un plan específico para evitar desfases entre estos dos medios de transporte.
El primero que alzó la voz en ese sentido fue el concejal de IU de Valencina de la Concepción, Francisco Arellano, quien ayer indicó que los usuarios de su pueblo que no dispongan de coche tendrán que esperar 40 minutos de media para coger la C-5, pues “no coincide la llegada de la línea M-175 a la estación de Salteras con la de los trenes”. Y por los horarios de autobuses, esos usuarios tampoco tendrán la opción de coger los trenes que llegan a Salteras antes de las 7.55 horas.
Cabe recordar que a raíz de la entrada en servicio de la C-5, el consorcio modificó cinco de sus líneas para que las estaciones tuvieran acceso en autobús. El enlace con Benacazón se hace a través de la M-168; la unión con Sanlúcar la Mayor y Villanueva del Ariscal, con la M-102; para los usuarios de Valencina de la Concepción, Salteras y Olivares, así como para el acceso desde Albaida del Aljarafe, está la M-175; los que vayan a cogerlo desde Santiponce deben usar la M-172 B; y finalmente, los que opten por Camas, pueden servirse de la M-170.
BALANCE.
El estreno del Cercanías del Aljarafe contó con 900 pasajeros que se trasladaron a la capital hispalense. Renfe señaló ayer que la cifra no es significativa en número, pero responde a la lógica al ser el primer día en servicio de un nuevo medio de transporte que tiene que calar poco a poco en la ciudadanía.
Esta cifra solo cuentan los usuarios de las seis nuevas paradas en servicio, siendo la más utilizada la de Villanueva del Ariscal-Olivares, con el 26%.
Le siguen Sanlúcar la Mayor (21,5%), Benacazón (17%) y Salteras (15,9%). Más discreta fue la afluencia en las más cercanas a Sevilla, como Camas (10,9%) y Valencina de la Concepción-Santiponce (8,6%). De todos modos, Renfe avisó de que es una primera visión de la demanda y que ésta puede cambiar.